EL AMIGO A CUESTAS
Mi cerebro es la expresión de la vida humana que vivo. Por él sé que existo. Y tánto, que lo considero mi cocina principal. Es en él donde preparo los mejores menús, exquisitos platos. Y es también en mi cerebro donde elaboro desastrosas cartas culinarias.
Entre exitos y fracasos, victorias y derrotas fui vagando por este mundo, con él a cuestas, indicando y alumbrándo mi camino del que algunas veces me habré desviado por apagarse la luz del amigo a cuestas. Vivimos riñendo. Hablamos, dialogamos y acordamos. En definitiva, él manda. Yo obedezco. No le importa lo que la gente pueda pensar de él. Sin embargo lucha porque no hablen mal de mi.
Me dice que calle. Digo F.POLISARIO.
Me dice que escuche. Digo Gdeim Izik
Me dice que no aprendo. Le digo que me gusta “emreifisa” de los combatientes saharauis.
Apaga su luz. Me quedo a ciegas.
B. LEHDAD